Cada mudanza tiene una historia. Hay familias que dejan su vivienda y deciden llevarse todo lo que han acumulado durante toda una vida mientras que otras personas se van poco más que con lo puesto. Por eso, los presupuestos de mudanzas en Bilbao que nos solicitan son tan variados como tipos de personas y mudanzas hay. Con muebles, con plantas, con electrodomésticos, con obras de arte, con tablas de surf. Mudanzas compartidas y hasta mudanzas con animales. En nuestra compañía hemos realizado mudanzas de todo tipo y justo de estas últimas son de las que queremos hablarte hoy.
Porque efectivamente, llevar a cabo un cambio de domicilio puede complicarse si tienes un gato, un perro o un pájaro que te lo ponga difícil. Aquí van una serie de consejos para realizar una mudanza segura si tienes que trasladarte con animales de compañía.
Antes del cambio de casa
Si tu nuevo domicilio no está muy lejos, es aconsejable que lleves a tu mascota a conocerlo y se vaya familiarizando con la casa y el entorno, sobre todo si hablamos de un perro o un gato. De esta forma, no le resultará tan desconocido cuando llegue el día del traslado definitivo.
También es importante que no empaquetes sus pertenencias hasta el día de la mudanza para que siga llevando, en la medida de lo posible, una “vida normal” con sus cosas, su sitio para dormir, sus juguetes…
No está de más que prepares una caja con algunas de esas cosas básicas y la mantengas en la vivienda hasta que llegue el momento del traslado. En esa caja puedes incluir comida, bebida, juegos, mantas… aquello que le haga sentir que sigue en casa. Además, cuando llegues al nuevo hogar, tendrás todos esos objetos localizados para que el animal se adapte mejor al cambio.
El día del traslado
Resulta muy positivo que las mascotas permanezcan en la zona más silenciosa y tranquila de la casa el día en el que se vaya a efectuar el traslado. Si contratas una empresa de mudanzas como la nuestra no dudes en comentar la presencia de la mascota para que los operarios lo tengan en cuenta a la hora de moverse por esa estancia en la que esté el animal. También puedes optar por dejar la mascota con algún amigo o familiar al menos durante un par de días.
En lo que respecta al transporte, las mascotas nunca podrán ir, bajo ningún concepto, en los camiones o las furgonetas empleados para realizar la mudanza. No estamos hablando de un bulto más sino de un ser vivo que debe ir en tu vehículo, concretamente en el asiento trasero y siguiendo las normas de circulación relativas a la presencia de animales en el coche.
La llegada a la nueva casa
Una vez llegues al nuevo domicilio, deja que sean las mascotas las que primero entren y exploren cada rincón. Y si notas que están asustadas, acompáñalas en esa primera visita para que vayan conociendo su nuevo hogar y no tengan miedo.
A pesar del caos inicial, es importante que reserves un hueco despejado para dejar las cosas del animal, al menos su cama, su comida… para que sienta que, a pesar de la nueva ubicación, todo va a ser igual dentro de la familia.
Y para finalizar, no te olvides de buscar un veterinario cercano y llevar a tu mascota a actualizar los datos del microchip, ya que puede ser fácil que se pierda durante esos primeros días en los que aún no domina el territorio.
En definitiva, ya ves que el sentido común y hacer que el animal no se sienta abrumado por tanta novedad son las principales pautas para efectuar este cambio con éxito. Recuerda siempre que, cuando vayas a solicitarnos presupuestos de mudanzas en Bilbao, es importante que menciones que tienes animal para que lo tengamos en cuenta y te ayudemos a que todo sea más sencillo para todos. En Azkar Mudanzas ayudamos a nuestros clientes a realizar mudanzas con animales de la mejor manera para ellos y sus mascotas.